El kárate, muchas veces vinculado al arte marcial y de combate por excelencia, sobre todo en los últimos años, se utiliza como una actividad deportiva con fines educativos, formativos, de enseñanza de respeto, cuyo cometido fundamental es ser una herramienta para mejorar la condición psicofísica, aumentando considerablemente las capacidades mentales (atención, concentración, autocontrol, gestión del estrés, consecución de objetivos, etc.) del sujeto que lo practica.
Como cualquier arte marcial, el kárate, de hecho, está marcado por la filosofía marcial de conocerse a uno mismo, sus límites y cómo superarlos, convirtiéndose así en una verdadera oportunidad, una herramienta con la que el sujeto practicante puede "ponerse en juego", demostrar su potencial y su capacidad para no rendirse ante las dificultades.
#karateyalgomas
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