No es necesario que te gusten las armas, pero debes entrenar con ellas

Un gobierno puede hacer todas las leyes de armas que le gustaría, pero los criminales siempre podrán tener un arma en sus manos

J. Wagner.

Lo dicho anteriormente se llama mercado negro y los criminales son conocidos por no obedecer las leyes del país.

Cuando enseño cursos de autodefensa a estadounidenses y les hago la pregunta: “¿Cuántos de ustedes poseen armas?” Se levanta poco menos de la mitad de las manos. Si es mi curso de supervivencia de mujeres lo que estoy enseñando, entonces solo se levantan unas pocas manos. Si estoy enseñando en Francia, Inglaterra u otros lugares de Europa, y les pregunto a mis alumnos: “¿Cuántos de ustedes han disparado un arma de verdad antes?” y olvídese de preguntarle a cualquiera de ellos si tiene uno, prácticamente no se levanta la mano. No es sorprendente, porque estos países no son “culturas de armas”. Sin embargo, con cultura de armas o sin cultura de armas, hombre o mujer, Europa o Estados Unidos, todavía se cometerán crímenes a punta de pistola y tiroteos.

Traigo este tema, porque el entrenamiento con armas de fuego debe ser parte de tu entrenamiento en defensa personal, te gusten las armas o no. ¿Por qué? Estas son las razones:

1. Si un criminal le apunta con un arma de fuego a quemarropa (dentro de la distancia de contacto del arma), debe saber cómo desarmarlo, en caso de que se presente la oportunidad y sea una opción viable. Eso requiere saber cómo funciona el arma, porque si pones tu mano frente a la boca del cañón, podrías perder la mitad de tu mano si el arma se dispara durante la lucha por tomarla. Sí, la bala va a hacer mucho daño, pero el gas a esa distancia va a ser peor. Además, cuando esa bala se disparó durante la pelea, y era de una pistola semiautomática, y tú y el malo todavía intentan arrancar el arma de las manos, no hay cartucho en la recámara. Esa es su señal para olvidar el arma de fuego e inmediatamente ir a por los ojos antes de que él se dé cuenta de lo mismo.

Dos de mis estudiantes holandeses en mi curso de Crime Survival luchan por la misma arma (una pistola de entrenamiento de goma), y eso no es sangre real, pero es sangre de escenario de un ejercicio anterior de entrenamiento con cuchillo. Casi todas las escuelas de artes marciales enseñan desarmar con armas (distancia de contacto).

2. Si logra quitarle el arma al delincuente, es posible que él quiera recuperarla. Por lo tanto, querrás dispararle a él antes de que intente recuperarla. Si no se dispara, querrás usarlo como arma de impacto. Sin embargo, si hay personas inocentes alrededor y usas el arma de fuego como un garrote, eso también tiene riesgos inherentes. ¿Conoces el telón de fondo? ¿Sabes cómo indexar? etc…

El estudiante de la izquierda, durante mi curso de supervivencia al terrorismo en Surrey, Canadá, está fuera del alcance del arma (armas de Airsoft en este caso), y hay dos hombres armados. Por lo tanto, las tácticas de supervivencia en el campo de batalla son la única alternativa.

3. El criminal puede deshacerse del arma mientras huye de la escena del crimen. Si un niño curioso puede tomar el arma de fuego, por ejemplo, le convendría saber cómo hacerla segura para que nadie resulte herido. Incluso si decides aferrarte al arma hasta que llegue la policía, por tu seguridad y la de los demás, es mejor que sepas cómo preservar la evidencia que está en el arma (huellas dactilares, palma, salpicadura de sangre, etc.). Si no lo hace, tendrá un oficial de policía irritado en el mejor de los casos y, en el peor, el mal manejo del arma podría terminar liberando a un criminal culpable.

Este oficial de seguridad privada aprendió de mí cómo mover un arma de fuego para mantenerla fuera de las manos equivocadas hasta que llegue la policía. Si tiene que mover una pistola, levántela siempre por el guardamonte, y eso se debe a que es el centro de gravedad del arma de fuego, esta parte es tan delgada que no habrá huellas dactilares utilizables en ella y no la molestará. cualquier evidencia.

4. Si le están disparando y no está al alcance de desarme, necesita saber sobre balística, imagen visual, el tiempo que se tarda en adquirir un objetivo fijo o en movimiento, cuántos segundos para recargar el arma de fuego y otros aspectos pertinentes. detalles.

La cuestión es que cualquier arma que los delincuentes puedan usar para atacar a sus víctimas, debes saber cómo usarlas y defenderte de ellas. La mayoría de los instructores de artes marciales pueden enseñarle cómo desarmar un arma, a una distancia de contacto, usando una pistola de entrenamiento de plástico, goma o madera. La regla general es que SI PUEDES TOCAR LA PISTOLA, PUEDES TOMAR LA PISTOLA. Ellos le enseñarán cómo golpear la cubierta, cubrirse y ocultarse, moverse de cubrirse a cubrirse y otras técnicas y tácticas para salvar vidas.

El paso final es aprender a disparar, e incluso en países con fuertes restricciones de armas, puede ir a clubes de tiro o campos de tiro donde puede pagar algunos cursos de seguridad con armas y lecciones de tiro.

Este es un equipo de seguridad que entrené la semana pasada en el sur de California. Esta es su decimocuarta lección. Todos menos uno nunca habían sido entrenados en tácticas de armas de fuego antes. Ahora todos están a salvo y son muy competentes en puntería y tácticas.

¿Tienes que convertirte en un “experto” con armas de fuego solo para saber cómo manejar una de forma segura o utilizar una en una situación de defensa personal? Sería bueno, pero no. Sin embargo, debes entrenar con ellos de forma regular. El solo hecho de prestar atención a los titulares diarios le indica en qué debe concentrarse.

SEA UN OBJETIVO DURO

J. Wagner