Cómo motivarse para un entrenamiento por la mañana

¿Has notado que cuando haces ejercicio por la mañana, te sientes más alerta y productivo durante todo el día? No es coincidencia – un entrenamiento por la mañana tiene varias ventajas para tu cuerpo y tu mente.

Las Ventajas de un Entrenamiento por la Mañana

En primer lugar, el ejercicio comienza a activar tu metabolismo y lo mantiene quemando calorías a una velocidad más alta durante todo el día. Además, hacer ejercicio temprano te quita tenerlo pendiente de encima y no tendrás que preocuparte por no tener tiempo para tu entrenamiento de ejercicios más tarde, si algo inesperado surge durante el día…

Un estudio reciente encontró que el ejercicio antes del desayuno puede contrarrestar los efectos nocivos del exceso de comida. Los investigadores compararon grupos de jóvenes activos que corren o van al gimnasio antes del desayuno con los que no ejercitan y con los que ejercitan después de comer abundantemente. Sólo el grupo que hace ejercicio antes de comer ganó poco o ningún peso y no mostró signos de resistencia a la insulina. Dejando la ciencia de lado, si para ti levantarte y hacer ejercicio por la mañana es casi imposible, prueba estos 10 trucos.

Mueve de lugar tu despertador

En vez de dormir con la alarma al lado de tu cama, muévelo al otro lado de la habitación. De esta manera, tendrás que levantarte y salir de la cama para apagarlo. Una vez que estás levantado, es mucho más fácil despertarte por completo, ponerte tu ropa, y salir por la puerta para una caminata o dirigirte al dõjõ para un entrenamiento por la mañana. Si utilizas una alarma que reproduce música, prográmala para que toque una canción que te motive a ejercitarte.

Haz una cita

Tener un compañero de entrenamiento es un gran motivador. Haz planes para verte con tu compañero de ejercicio en el dõjõ temprano. Tienes menos probabilidades renunciar al ejercicio si sabes que alguien te está esperando. Nunca querrás ser la persona que se quedó dormida y dejó plantada a la otra persona.

Haz amigos en el gimnasio

Si no tienes un compañero de ejercicio lo más probable es que tengas uno después de unas semanas con una rutina de entrenamiento por la mañana en el gimnasio. Te familiarizarás con los compañeros habituales, que también se entrenan allí a esa hora del día. Esto inspira a levantarse y moverse, porque sabes que están ahí y se preguntarán dónde estás si no vas uno o dos días. Es un factor social que puede ayudar a motivarte por las mañanas.

Ten una meta establecida

Cada domingo por la noche, crea tu programa para la próxima semana. Por ejemplo: “Esta semana, me levanto a las 7:30 am el lunes, martes, jueves y viernes, y correré tres kilómetros antes de irme al trabajo.” Programa tu entrenamiento por la mañana como si se tratara de una cita. Tienes mayor probabilidad de seguir tu rutina de entrenamiento por la mañana, si lo escribes en una agenda. Si faltas a tu entrenamiento, escribe una nota en tu agenda para explicar por qué fallaste. Más tarde, puedes analizar tus excusas para no entrenar y buscar la manera de superarlas.

Carga música motivadora en tu iPod o tu teléfono

La música es un buen motivador por la mañana. Si tienes una gran lista de reproducción, puede ser suficiente para salir de la cama. Las investigaciones han demostrado que escuchar música al hacer ejercicio puede producir pensamientos positivos y ayudar a contrarrestar la fatiga. Los expertos sugieren el uso de un tempo más rápido para comenzar los ejercicios y el cambio a un ritmo más lento hacia el final de tu rutina de ejercicios.

Prepárate la noche anterior

Para dar continuidad a una rutina de entrenamiento por la mañana, ayuda mucho dejar lista la ropa y el equipo de entrenamiento la noche anterior. De esa manera no perderás tiempo al vestirte y estar listo para tu entrenamiento. Una posible desventaja del entrenamiento por la mañana es que el tiempo puede ser limitado – supera esta limitación teniendo una rutina preparada y no perder el tiempo buscando tu equipamiento para entrenar.

Premia tus esfuerzos

Si cumples con tus metas de ejercicio y te levantas temprano cuatro de cinco días para hacer ejercicio durante una hora, haz algo bueno por ti mismo al final de la semana como ver una nueva película con un amigo o ir a un partido de fútbol. Compra nueva ropa de entrenamiento, contrata un masaje – encuentra lo que te motiva, y utilízalo para que te saque de la cama cada mañana para hacer tu rutina de ejercicios.

Díle al mundo acerca de tus planes

Gracias a Facebook y Twitter, etc… puedes decirle a todo el mundo acerca de tu rutina de entrenamiento por la mañana. Publica tus planes de ejercicio en Facebook. Una vez hecho esto, es más difícil no seguir adelante con tus planes de entrenamiento por las mañanas. También puedes utilizar las redes sociales para presumir tus logros – dile a tus amigos que nadaste o corriste 10 km o que vas saliendo de una clase de Kick Boxing o Karate antes del trabajo. Seguramente quedarán impresionados, y te motivará para continuar tus objetivos.

Demasiado soñoliento? Dale tiempo

Al principio puede ser difícil no apagar la alarma y volver a dormir, en lugar de saltar de la cama para hacer ejercicio o ir hacer una caminata de 30 minutos. Pero después de una semana o dos, tu cuerpo se ajustará a tu programa de entrenamientos tempranos y será más fácil levantarse y salir de la casa para dirigirse al gimnasio. He aquí por qué: Cuando haces ejercicio con regularidad, dormirás mejor por la noche. Al dormir mejor por la noche, despertarse para hacer ejercicio es más fácil.

Regálate un mejor desayuno

Es posible que desees comer algo rápido, como una banana o un puñado de almendras, para darte un impulso de energía antes de tus entrenamientos. Luego, después terminar tus ejercicios por la mañana, come un desayuno real – y que sea especial como recompensa por tus esfuerzos. Pero ten cuidado de no sabotear tus esfuerzos de ejercicio por el consumo de un alto contenido en grasas. Si te prometes a ti mismo un saludable desayuno, como huevos con verduras o avena con frutas y nueces, cuando vuelvas, te motivarás aun más.

Sólo añadir a todo lo expuesto, VOLUNTAD Y PERSEVERANCIA