El tiempo dedicado a lo básico siempre es bien empleado

¡Nunca descuides los fundamentos de tu arte marcial!

Cada arte marcial tiene un conjunto de técnicas básicas que se enseñan cuando un estudiante comienza a entrenar. Debido a que son las primeras cosas que se aprenden, es posible que el estudiante quiera sobresalir rápidamente más allá de lo básico para llegar al material más avanzado y brillante, nuevo y mucho más deseable. Sin embargo, la clave para la habilidad de las artes marciales de alto nivel radica en dominar los fundamentos: volver a lo básico, por así decirlo.

Lo esencial

¿Cuáles son los fundamentos del arte que estudias? Por lo general, son las cosas que aprendiste en las primeras semanas o meses de entrenamiento: las primeras posturas, patadas, katas, lanzamientos y sumisiones. Concéntrese en ellos y crea una lista detallada. ¿Ha pasado un tiempo desde que trabajaste en ellos? Es posible que estén oxidados y no tan ajustados como sus técnicas y habilidades más recientes, por lo que el primer paso es desempolvarlos y hacer que vuelvan a funcionar con la máxima eficiencia.

Repeticiones

Simplemente hacer ejercicios no ayudará a menos que mejore lo que estás perforando. La clave para que los ejercicios den buenos resultados es comenzar despacio y garantizar la forma adecuada. Si estás trabajando en una técnica que no has hecho en mucho tiempo, tómate un tiempo adicional para verificar que lo estés haciendo correctamente. Los detalles como cuándo dar un paso, desplazar el peso, disparar el arma, etc., son de suma importancia.

Una vez que tengas un mejor conocimiento práctico del material y hayas solucionado cualquier mal hábito, realiza algunos ejercicios. Haz series de 10, 20, 25, etc., y desarrolla velocidad, precisión y fluidez de forma natural a través de la repetición.

Variación

Cuando estés seguro de que has quitado las telarañas y estás corriendo como un Bugatti Veyron bien afinado, es hora de encontrar algunas variaciones y nuevas aplicaciones para tus técnicas. Limítate a una técnica básica y encuentre todas las permutaciones que puedas mientras dejas fluir la técnica. Si estás trabajando en un lanzamiento, una patada o un puñetazo, prueba diferentes ángulos, configuraciones y situaciones.

Experimentar

No tengas miedo de cometer errores. Recuerda las variaciones que te gustan, anótalas y consérvalas. Tener un diario es una buena idea, tanto para catalogar tus ideas como para medir tu progreso.

Maestría

Dominar algo es enseñarlo. Desde mis primeros días como estudiante de artes marciales, esto me lo han dicho todos los maestros que he tenido. Es verdad. Si quieres ser un experto en algo, enséñalo. Toma una nueva habilidad y ayuda a un principiante o a tu compañero de entrenamiento favorito a dominarla.

Sigue la misma fórmula para todas tus técnicas, habilidades y materiales básicos, y tendrás una base sólida sobre la cual construir para tu próximo objetivo. Ya sea que estés luchando por una promoción o la simple satisfacción que viene con la confianza de conocer su material a un nivel superior, el tiempo dedicado a lo básico siempre es tiempo bien empleado.