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| Familia Machado |
Cuando miro hacia atrás en la forma en que hacíamos las cosas cuando era cinturón blanco, puedo decir que ahora hemos mejorado toda la base del jiu-jitsu para que mis cinturones blancos sean mucho mejores de lo que éramos. Los atletas de hoy son mejores en todos los deportes, por lo que el jiu-jitsu no es diferente. Pero ha habido bastantes mejoras en la mecánica y la estructura de enseñanza que facilitan las cosas y agudizan a los estudiantes. Los estudiantes de cuando comencé a fines de la década de 1960 no durarían minutos con estudiantes del mismo rango hoy. Hoy están más condicionados, entrenan en judo, entrenan en la lucha libre.
"Pero diré que los elementos centrales, los fundamentos, han permanecido igual".
Carlos Machado, el maestro de jiu-jitsu brasileño que pronunció esas palabras, comprende esos elementos centrales tan bien como cualquiera. Su tía estaba casada con Carlos Gracie, el mayor de los hermanos que ayudaron a sentar las bases de BJJ. A través de esta conexión familiar, Machado, y más tarde sus hermanos Roger, Rigan, Jean Jacques y John, comenzaron a entrenar con las mejores personas de jiu-jitsu de la época. Entre los que aprendieron estaban Helio Gracie, Carlson Gracie, Rolls Gracie y Carlos Gracie Jr.
Cada instructor tenía su propio estilo y énfasis, dijo Machado. Por ejemplo, Helio enfatizó la defensa personal, Carlson y Rolls enfatizaron el entrenamiento para la competencia, y Carlos Jr. se concentró en los aspectos técnicos del juego. Los fundamentos que Machado obtuvo de cada uno de ellos permanecen con él hasta el día de hoy.
Si bien el BJJ moderno incorpora muchos elementos nuevos, como guardias exóticos y presentaciones complejas, no se puede olvidar que tiene un núcleo que nunca se debe abandonar, dijo Machado. “Existe una teoría en jiu-jitsu que dice que lo que comienza como una grieta en su base puede convertirse en un gran agujero a medida que pasa el tiempo. Lo que quiero decir es que si te pierdes un movimiento básico cuando eres un cinturón blanco, tendrás una grieta en tu conocimiento. Cuando te conviertes en un cinturón azul, puedes disfrazar esa grieta aprendiendo más técnicas para ocultarla, pero cuanto más avanzas en el rango, más grande se vuelve la grieta ”.
Continuó citando un ejemplo: “Si tienes un escaso escape del monte como un cinturón blanco, es una grieta. Pero otros cinturones blancos pueden no tener la habilidad para hacerte pagar, por lo que puedes salirte con la tuya. Cuando te conviertes en un cinturón azul, puedes intentar disimular tu falta de habilidad para escapar de la montura desarrollando una mejor protección para evitar que te coloquen en la posición de montura. Pero tendrá más problemas cuanto más alto vaya, porque un compañero de entrenamiento más capacitado podrá aprovechar esa grieta.
"El tapete revela tus fortalezas pero también expone tus debilidades".
Un día de ajuste de cuentas siempre espera, incluso para los cinturones negros hábiles, cuando esa grieta en la base de uno debe pagarse, dijo Machado. “El cinturón negro puede funcionar muy bien usando sus fortalezas, pero si alguna vez se lo coloca en un lugar donde tiene debilidad, se vuelve como un cinturón azul. Así que siempre llevo a mis alumnos de regreso a lugares incómodos y los refresco al salir de problemas.
"Eso es algo en lo que siempre debe trabajar: sentirse cómodo con lo incómodo".
Al llegar a América
Machado aprendió a lidiar con situaciones incómodas al principio de su carrera de jiu-jitsu. Como parte de la familia Gracie, aunque con un apellido diferente, sintió la presión de desempeñarse a un alto nivel cuando representaba a la familia en competencia. También se esperaba que sus hermanos menores, que lo siguieron en el deporte, mantuvieran los mismos altos estándares. Los hermanos se convirtieron en socios de entrenamiento y en cajas de resonancia entre sí, idearon sus propias ideas y eventualmente sirvieron como sus propios entrenadores.
En 1988, Machado visitó por primera vez los Estados Unidos mientras viajaba con su primo Rorion Gracie, quien había enseñado BJJ en Los Ángeles durante varios años. Su destino era la convención anual de Las Vegas que Chuck Norris organiza para su asociación de artes marciales. Allí, el dúo enseñó un seminario de jiu-jitsu, y Norris quedó inmediatamente enganchado. Carlos regresó a Brasil, pero su hermano Rigan se mudó a América y comenzó a ayudar a Rorion a enseñar en su dojo de garaje y más tarde en la primera academia de Gracie.
No mucho después, Carlos y los otros hermanos se unieron a Rigan en Estados Unidos. Pero luego una disputa con Rorion llevó a los Machados a abrir su propia escuela en el sur de California con el respaldo de Norris. La escuela fue un éxito instantáneo, en gran parte debido al método de enseñanza exhaustivo de los Machados.
"Nos apasiona enseñar jiu-jitsu, y queremos asegurarnos de que un estudiante nunca abandone el tapete con una pregunta sin responder", dijo Carlos. “Si no tengo la respuesta, no me moveré hasta encontrar una manera de darte una solución. Me gusta desglosar las cosas para que el jiu-jitsu sea tan minucioso que se convierta en una ciencia. Creo que esto motiva a los estudiantes porque ven que es un arte tan fascinante. Es interminable. Puedes hacer lo mismo de mil maneras diferentes, y nunca dirás que sabes lo suficiente ”.
Vida simple
Aunque BJJ tiene que ver con los detalles, Machado dijo que el núcleo del arte gira en torno a la simplicidad y la eficacia. Si una técnica tarda demasiado en hacer el trabajo, se vuelve propensa al fracaso. Para los principiantes, tener más de tres pasos a seguir puede convertirse en un desafío casi insuperable. Incluso para los cinturones negros, dijo, las probabilidades de tener éxito con cualquier técnica dada disminuyen cuando el movimiento implica más de tres pasos.
"Cuantos más pasos tenga una técnica, más posibilidades le dará a un oponente para arruinar la situación", dijo. “Una técnica sofisticada podría ser efectiva si eres un campeón mundial que puede hacerlo, pero ¿de qué sirve si no puedes pasar ese movimiento a tus alumnos porque es demasiado complicado? [Eso significaría] que estamos comenzando a limitar el jiu-jitsu a las personas que tienen muchas habilidades naturales o que pueden entrenar muchas más horas que cualquier otra persona. Un campeón puede hacer algunos de estos movimientos, [pero] están más allá del alcance del Joe promedio.
“No creo en eso. No es el jiu-jitsu [camino]. Es por eso que trato de mantenerme simple y efectiva. Si puede limitar sus movimientos a no más de tres pasos, tendrá un 90 por ciento de posibilidades de éxito con ellos ”.
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| Chuck Norris y Machado |
Walker, Texas Ranger
El éxito de los Machados ha sido fenomenal desde que se mudaron a los Estados Unidos. Varios años después de establecerse en California, Norris invitó a Carlos a visitar Texas, donde se filmó Walker, Texas Ranger. Norris luego lo convenció de mudarse al Estado de la Estrella Solitaria y abrir una escuela de jiu-jitsu en el almacén en el que se filmó la serie CBS. Para mantenerlo ocupado mientras establecía su escuela, Norris le dio a Machado un trabajo regular como especialista y coordinador de peleas en Walker.
"Fui golpeado por Chuck Norris más que nadie vivo, y también asesinado varias veces", dijo Machado, alegremente. "Es uno de los mejores amigos que he tenido y es la razón por la que vine a Dallas".
Machado continúa enseñando en su dojo de Texas y en eventos organizados por la red de escuelas que él y sus hermanos construyeron en los Estados Unidos. En un reciente seminario de BJJ en Las Vegas, por ejemplo, guió a más de 200 estudiantes, algunos de los cuales eran novatos completos, en las complejidades del arte.
"Se me ocurrió un tema: grande o pequeño, barrerlos a todos", recordó Machado. “Traté de enseñar algo que todos pudieran seguir sin importar la experiencia. Comenzamos con la guardia de mariposa y los ganchos dobles como nuestra premisa. El protector de mariposa es bueno para barrer a los oponentes, y los dobles ganchos permiten mucho más control. Esto combina bien con el agarre gi y no gi, por lo que no importa si llevaban gi o no ”.
Machado dijo que el protector de mariposa le da al usuario una clara ventaja cuando se trata de barridos, pero también se puede usar para realizar una sumisión o retener el protector. Sin embargo, al igual que los mejores maestros en cualquier arte, se apresura a señalar uno de los aspectos negativos asociados con la posición: puede ocasionar problemas ocasionales en el enfrentamiento sin gi porque un oponente sudoroso podría escaparse de su alcance. Esta es una razón por la que le gusta emplear el cierre de doble gancho del protector de mariposa: permite un buen control incluso sin un gi.
Sobreviviente
Una vez que haya establecido la guardia de mariposa y los ganchos dobles, dijo Machado, puede intentar barrer, pero también puede ir a una sumisión, con la clave para que ambos rompan primero el equilibrio del oponente. Él lo llama "recoger la fruta baja". Si se le presenta una presentación fácil, tómela, aconsejó. De lo contrario, es posible que desee optar por un barrido. La clave para barrer desde esta posición, dijo, es el control de la cabeza.
"Si quiero barrer a un hombre y tengo la cabeza y el brazo atrapados, primero lo tiraré en la dirección opuesta a donde quiero llevarlo", dijo Machado. “Cuando se resista, me moveré en la dirección que realmente quiero llevarlo, girando su cabeza en esa dirección. Cuando su cabeza ruede, el resto de su cuerpo lo seguirá.
“Si agarras el anillo en la nariz de un toro, irá a donde quieras. Es lo mismo cuando controlas la cabeza de tu oponente. Donde sea que lo gire, él irá.
Una clave para hacer que tales movimientos funcionen es ser más eficiente que tu oponente en lo que respecta al uso de energía. Machado fue tan lejos como para decir que este puede ser el elemento más importante del jiu-jitsu. Su consejo: busca formas en que puedas gastar menos energía que tu adversario. Cuando esté en la posición superior, coloque la mayor cantidad de peso posible sobre su oponente, lo que lo obliga a llevar su masa y, por lo tanto, gastar energía. Cuando estés en la parte inferior, incluso contra un oponente que está tratando de golpearte, no entres en pánico ni te dejes claustrofóbico porque eso puede interrumpir tu respiración y hacerte quemar el exceso de energía.
"En el jiu-jitsu, uno sobrevive, luego iguala, luego capitaliza", dijo. "Después de sobrevivir, puedes crear espacio, rotar, escapar, pero sobrevivir es lo primero, y respirar es el número 1. Mantén la calma y no desperdicies tu energía".
Todos en la familia
Machado ha dedicado su vida a impartir lecciones como esa a sus estudiantes, muchos de los cuales se han convertido en competidores prominentes. Uno de ellos es el campeón mundial de jiu-jitsu brasileño Rafael Lovato Jr., un cinturón negro bajo Machado. Otro es el luchador de UFC Stephen Thompson, para quien Machado ha servido como entrenador de BJJ. Tiene una conexión especial con este último porque el artista marcial es, de hecho, su cuñado.
Machado comenzó a conducir seminarios para el padre de Thompson, Ray, en su escuela de karate de Carolina del Sur hace 20 años. "Ya estaba haciendo un entrenamiento de jiu-jitsu allí", recordó Machado. “Tuve un estudiante que se mudó allí y comenzó a hacer karate con él, y él me organizó un seminario en 1997. Se convirtió en una tradición para mí ir allí un par de veces al año y enseñar. Ray se convirtió en mi alumno, pero no conocí a su hija Lindsay hasta tres o cuatro años después porque ella iba a la universidad en ese momento. Finalmente la conocí en 2000. También era muy buena en karate, y venció a Stephen hasta que tenía unos 15 años.
“De todos modos, comenzamos a salir y terminamos casándonos. Te diré que en jiu-jitsu, conoces a las personas más increíbles, ¡incluso a tu esposa, si no tienes cuidado! ”
Mark Jacobs es escritor independiente y artista marcial con sede en Nueva York. Para obtener más información, visite su sitio web maworldreport.com. Para más información sobre Carlos Machado, visite carlosmachadojiujitsu.com.
por Mark Jacobs
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