Una forma de combate, el Krav Maga, a iniciativa del Regimiento de Caballería Ligero Acorazado (RCLAC) "España" nº 11, comienza a integrarse en los métodos de autoprotección de los soldados como parte de su formación en situaciones de combate cuerpo a cuerpo.
Según informa el Ministerio de Defensa, suboficiales del Regimiento, aficionados a las artes marciales y deportes de contacto, recibieron formación del Departamento Nacional de Krav Maga perteneciente a la Federación Española de Lucha y Disciplinas Asociadas antes de impartirlo en la unidad como elemento de defensa personal. Este sistema de combate, basado en la lucha de contacto del ejército israelí, aporta la ventaja de ser efectiva sin importar la forma física ni edad de quien lo practique. Se vale de movimientos simples y naturales, utiliza la fuerza del enemigo en su contra, combina la defensa con el contraataque en un solo tiempo y busca los puntos débiles del atacante, uniendo lo más práctico y eficaz de distintas artes marciales. Del mismo modo, enseña cómo aprovechar las armas tradicionales para realizar desarmes, defensas...además de perfeccionar la lucha armada cuerpo a cuerpo.
Mediante el entrenamiento -consistente en dos horas semanales- y el aprendizaje de un manual con 40 técnicas de autodefensa, se consigue dotar a los soldados de los conocimientos necesarios para defenderse ante un amplio abanico de amenazas. Se trata de que aprendan a utilizar un mínimo de técnicas de fácil ejecución y realizables con el equipo que porte el combatiente.
fuente: ateneadigital.es
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